De antemano hay que mencionar que un
jardín, una terraza, un patio muy grande no sustituye al paseo, lo que si puede
generar son conductas inapropiadas para la convivencia con el ser humano.
Por muchos años que llevemos (15000 años es lo
que se cree) al lado de nuestros fieles amigos los perros, no debemos olvidar
que por encima de esa relación se encuentra la necesidad del animal. Hay que recordar que como especies
diferentes que somos las necesidades que tenemos son diferentes, quizá
menos de lo que pensamos.
Se debe sacar a pasear a nuestros
perros por dos motivos fundamentales: porque debe hacer sus necesidades
con regularidad y evitar que tu hogar sea afectado por olores y visita de insectos
desagradable; y porque todos los perros sienten la necesidad de
caminar en lugares no cerrados, los
perros necesitan explorar otros lugares, relacionarse con otros perros y
humanos, tener diferentes experiencias y estas necesidades las lo
conseguimos cubrir mediante el paseo, claro está que al realizar el
paseo con la frecuencia y de la forma correcta generaremos un mayor
equilibrio entre nosotros y el perro además de reforzar el vínculo.
El tiempo y
la frecuencia que se debe aplicar a los paseos de su mascota dependerán
exclusivamente de la raza y del carácter de su perro, sería recomendable
sacarlos de tres a cinco veces al día y, por lo menos, dos de estas
salidas tendrían que ser largos paseos de, como mínimo, dos horas de duración
al día.
Los paseos
debemos estructurarlos durante la semana de tal
manera que unos días aprovechemos el paseo para que el perro juegue y se
relacione con sus congéneres, otros días que sólo se entretenga con los
olores y con nosotros, bien a través del juego o también realizando ejercicios de educación
básica para seguir reforzando lo que el perro sepa.
Durante los paseos debemos llamar al perro
varias veces y mantener el contacto con él, no es que por ser los líderes nos
tenga que seguir, sino que realmente estas interacciones las realizamos
para mantener siempre el contacto y el control del perro en caso de que
necesitemos que venga con nosotros. La referencia del perro en el paseo somos
nosotros eso no lo podemos obviar.